Editado por Babidi-bú, forma parte de la colección "El hada y el duende".
Si lees este cuento con Piluca aprenderás a bailar con el corazón.
Piluca no entiende de fronteras ni de razas, su danza tiende puentes y provoca sonrisas.
Sus pies se deslizan de la mano de Yuan recordando a un poderoso animal.
Sus giros envuelven a Basant entre deliciosos aromas.
Sus pasos abrazan a Claudia Patricia en el patio escolar.
Sus bailes se llenan de colorido con los ritmos de Alika.
Piluca no deja de bailar.
En su rincón, en cualquier lugar, todas las personas pueden bailar.
Su corazón es tan ancho como el mundo, nadie está de más.
Un cuento de gran sensibilidad con un mensaje de unión y paz.
Os dejo su enlace de Facebook: Cuando Piluca bailaba
Y un enlace de la web de la ilustradora: Raquel Rabasco
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